BIOGRAFÍA, ENTREVISTAS, AUSIOVISUALES Y ARTÍCULOS DE RUBEM DANTAS
|
Audiovisual de Rubem Dantas y Manuel Soler acompañando al cajón a Paco de Lucía
|
Audiovisual de una entrevista a Rubem Dantas
|
Audiovisual de Javier Viana en el I festival de cajón peruano (Lima 2008) |
Entrevista a Rubem Dantas, por Silvia Calado Flamenco-World
|
Audiovisual: Tangos (Tomatito, Jorge Pardo, Carles Benavent, Rubem Dantas, Juan Carmona)
|
Entrevista a Rubem Dantas, por Tertulia Andaluza
|
Audiovisual de Paco de Lucía en directo con el Grilo y Rubem Dantas
|
|
Los percusionistas tenemos un cierto don de mando, marcamos el ritmo, por diario el Ideal
|
El percusionista monta la Granada Reunión Banda todos los jueves de Mayo, por Buscamusica.es
|
|

Rubem Dantas y Manuel Soler al cajón, acompañando a Paco de Lucía (una de las primeras ocasiones que se ha podido ver el cajón en el escenario en España).
Código del texto de relleno<iframe
width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/97wAWrSNXLE"
frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
_____________________________________________________________________________________________Entrevista a Rubem Dantas Código del texto de relleno<iframe
width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/lK3DpeufMwI"
frameborder="0" allowfullscreen></iframe>_____________________________________________________________________________________________
Javier Viana en el I festival de cajón peruano (Lima 2008),
hace unos comentarios sobre el cajón en España, la percusión que
existía antes de la entrada de los bongos, congas y el cajón. En el
mismo audiovisual podemos escuchar a Rubem Dantas exponiendo su primera
vez que vió y escuchó una cajón peruano, así como su llegada a España.
Rafael Santa Cruz también aparece en el audiovisual, describiendo a
Carlos Caitro Soto. Código del texto de relleno<iframe
width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/bm79Db3Vu3Y"
frameborder="0" allowfullscreen></iframe>______________________________________________________________________________________________
Rubem Dantas, percusionista. Entrevista
“El cajón no tiene fuerza para estropear el flamenco. Y yo tampoco”
Silvia Calado. Madrid, enero de 2009
Treinta
y dos músicos repitieron el chantaje. ¿Que tú vas a grabar tu primer
disco y yo no voy a tocar? Y así es como ‘Festejo’, el primer disco en
solitario de Rubem Dantas
-sí, el primero- tiene como colaboradores desde Paco de Lucía a Carles
Benavent, pasando por Jorge Pardo, Chano Domínguez o Joaquín Grilo. Eso
sólo citando a los más próximos al flamenco, pues este disco no entiende
de mapas. Lo mismo asoma el jazz de Chick Corea, que la percusión hindú
de Nantha Kumar. El percusionista brasileño entiende la música
universalmente. Y por eso está orgulloso de que por primera vez “una
manifestación cultural de América viniera a Europa a incorporarse en un
estilo con mucha antigüedad”. Se refiere a la integración del cajón
peruano en el flamenco. Él fue el artífice.
 |
Rubem Dantas (foto Daniel Muñoz) |
Cuéntanos la historia de ‘Festejo’, tu primer disco en solitario...
Acabé
de grabar pronto. Todo ha sido un proceso normal. Soy meticuloso, pero
sé con qué cosas tengo que ser meticuloso. Lo que nunca hubo
posibilidades es de hacer nada con las compañías. Es como si fueras al
cumpleaños de tu amiga, llegas a su casa y tú sola te comes la tarta
entera. Eso no existe ni en nuestra infancia, ¿por qué quieren hacer eso
con los discos la industria? Así que como estaba producido por mí
mismo, dije que no, que iba a esperar un tiempo, a ver cuándo podía
hacer las cosas a través de un sello propio o de un amigo que sea
socio... cualquier otra fórmula. Ya surgió la posibilidad de hacer la
página web, poner todo por ahí... y así fue tomando forma, porque
realmente no se pudo hacer ningún negocio. Quieren la tarta entera para
ellos solos. Entonces estoy ahí, rodando eso, sin parar.
¿Cómo fue el proceso de grabación?
Una
vez fuimos a un estudio de un amigo. Y resulta que cuando llegamos
allá, hicimos la primera prueba y dije ya está. Había que irse a un
estudio bueno. Y fuimos a Musigrama, el estudio de Joaquín Cobos, que
nos abrió aquello. Me dijo que confiaba en mí. Y el primer día que
escuchó la cosa, se asustó. “¿Qué están haciendo?”, dijo. Yo me asusté
también. Pero él me aclaró que qué gusto, que qué cosa más buena. Y
aquello siguió para delante y se acabó muy pronto, siendo una producción
hecha por mí mismo.
Hay como treinta músicos en el disco. ¿Cómo los fuiste encajando?
Treinta
y dos. El disco se iba a hacer con ocho personas, pero empezó a llegar
al oído de uno y de otro que yo estaba haciendo el disco. Y, nada, el
viejo chantaje. ¿Que tú vas a hacer tu primer disco y yo no voy a estar?
Entonces, venga chantajes, chantajes, chantajes... y me apañé con
treinta y dos músicos.
No habría dinero para pagarlo, ¿no?
Aunque
tuviera el triple de ese dinero, no lo podría pagar. Realmente, todos
los músicos que han pasado por ahí me han hecho sentir muy contento, muy
feliz, me dieron lo mejor de ellos. En el disco se ve también, mucha
gente lo dice.
¿Qué han aportado los flamencos en el disco?
Ellos
aportaron al disco un montón de cosas, incluso lenguajes actuales. Es
que el disco también tiene esa posibilidad, que realmente las dos
culturas estén en su sitio como ellas siempre estuvieron, no una
reforzada y la otra por debajo. No, en mi disco está claro: una
situación y otra situación (y abre un brazo y después el otro).
En la situación de la percusión, que existe en cualquier lado del
planeta, fue donde realmente las músicas americanas tuvieron más
posibilidad. Porque resulta que fue la mezcla entre Europa y África, las
dos cosas juntas. Hoy el do-re-mi-fa-sol-la-si, se entiende con el
ritmo ese y con cualquier otro ritmo. Pero en este disco están
preparadas las dos cosas intelectualmente, tanto de un lado como del
otro. Normalmente, las cosas son intelectuales de un lado o
intelectuales del otro lado. Ahí en el disco no hay ese problema de
identidad. Ellos llegaron y se asomaron a la oportunidad de ver la
situación musical desde ese punto de vista. Eso realmente fue
inolvidable. Como dije antes, aunque tuviera el dinero para pagarles,
pagaba tres veces más, y no iba a tener dinero.
Entre todo el elenco destaca Paco de Lucía. ¿Qué significa para ti?
¿Para
mí? ¿Paco? ¡Oh, Paco! Muchas cosas, mi amigo, mi maestro, mi padre, mi
gurú... un montón de cosas. A quien puedo contar las cosas... mucho,
mucho. Paco es mi universidad, la universidad del flamenco, el decano.
Los decanos son Paco, Camarón,
Ramón de Algeciras... ellos son los decanos de mi universidad, ellos
son la mejor universidad que yo he tenido. Aunque no me quejo de ninguna
universidad, pues he tenido otras, pero esa es impresionante. Y contar
con ellos... ¡uaaaaah!, es increíble. No es hoy sí y mañana se
acabó, sino que siempre estamos ahí “oye, ¿por qué no haces? Oye, ¿por
qué no...?”. Siempre nos estamos provocando, es algo vivo, a mí me
gusta.
¿Qué te enganchó del flamenco a ti que vienes de una música ya de por sí muy rica?
Me
engancha de la música también muchas veces el desprecio que tiene hacia
sí misma. Y eso me ha dado mucha pena del flamenco. En América yo lo
tenía como algo muy valorado de Europa, como muy arrogante. Y cuando
llegué, vi que no tenía ninguna protección. ¿Quién protege eso?
Entonces, quienes lo protegen son Camarón, Paco, Carmen Amaya,
Diego del Gastor, el Tío Sabicas... Toda esa gente son los protectores y
entonces yo me asomé a ese carro también. Pero en vez de con cosas que
eran tradicionales en una época del flamenco, me asomé con otras cosas,
con la percusión... Tuve que buscar mi sitio ahí dentro. Yo quería tocar
eso y para tocar eso, yo quería hacerme mi sitio.
Y
así se lo dije en Bahía antes de venir a Europa a un amigo guitarrista
italiano. Estuvo en España viviendo durante unos meses, en el sur. Y
como él es guitarrista clásico, había acabado su carrera en Berlín,
aprendió cosas de mineras, de granaínas... esos tipos de toques, no
bulerías ni nada de eso. Y en Brasil un día en su casa, que me invitó
para comer una pastita, empezó a tocar eso y le pregunté qué era. Me
dijo que era flamenco, una música de España. Y me pareció tan bonito...
Nosotros es que teníamos en la televisión de Brasil un programa que se
llamaba ‘Carta de España’, pero sólo pasaba cosas regionales, la jota,
cosas de Euskadi con la chalaparta, la música gallega... Pero de
flamenco no había nada. Cuando escuché a mi amigo... ¡uaaaahhh! ¿Y la
percusión de eso cómo es? Y mi amigo me dijo que no había percusión. ¡Yo
me voy para allá a ponerle percusión! A la primera oportunidad que
hubo, me vine para Europa. Y fue con un grupo de música folklórica, con
toda la tradición de la música de Bahía, el candomblé, la capoeira...
todas esas cosas afro. Y empecé a conocer. El día que mi grupo se iba
para Brasil, fui a despedirlos al aeropuerto, jugamos capoeira en el
aeropuerto, todo el mundo estaba loco mirando, porque en aquel momento
era muy poco conocida en Europa. Jajaja. Era el año 76. La Capoeira era
una cosa que ha tenido muchos problemas para integrarse en la cultura de
Brasil; antes era visto como algo marginal, toda la cultura negra en
América siempre ha tenido problemas.
Aquel
mismo día tuve el regalo de conocer a Paco en un café, con Ramón de
Algeciras. Empezamos a hablar y me dio su teléfono, pero como Francisco
Sánchez Gómez, no como Paco de Lucía. Jajajaja. Ah, muy bien. ¿Y
tú eres percusionista? Sí. Pues estoy buscando un percusionista porque
ya no aguanto más. Y me dio su teléfono y le dije que lo llamaría. Ya en
Madrid me encontré con una amiga que me llamó para vivir en su casa,
una chica de Sevilla, de la que me hice muy amigo... hasta hoy. Un día
estaba lleno de papeles por los bolsillos y me compré una agendita
pequeña y empezamos a anotar los nombres. Y cuando ella leyó Francisco
Sánchez Gómez me dijo “¡Rubem, ese hombre es Paco de Lucía!”. Pero ya me
dio vergüenza llamarlo por no molestarlo. Cuando nos conocimos de
verdad fue cuando Pedro Ruy-Blas habló con él para hacer el disco de
Manuel de Falla. Cuando llegó a casa y me vio me dijo que por qué no lo
había llamado. Y le contesté que había descubierto que era famoso y ese
rollo, y no quería molestarle. Y le gustó mucho. A partir de ese día,
amigos.
Ahora que se han cumplido 25 años desde que el cajón llegara al flamenco, ¿cómo valoras la integración del instrumento?
La
integración del cajón en el flamenco es impresionante. Yo como dato veo
que es la primera vez que hay una manifestación cultural de América que
viene a Europa a incorporarse en un estilo con mucha antigüedad. Antes
nunca hubo ese amor. Yo siempre estoy con muchos problemas con los
padres, con los nietos y con los abuelos, pero ante el planeta. América,
Europa, Asia... no nos respetamos. Los Rodríguez y los Fernández que
hay allá, si hacen la prueba pueden descubrir que su trisabuelo puede
estar en Extremadura. ¿Entiendes? ¿Por qué procedemos de esa forma?
Incluso sin respeto. Para el flamenco ha sido impresionante, para todo y
para todos. Para la industria ha sido fantástico, para la gente que
viene y encuentra otra asignatura dentro del flamenco, la percusión,
también. Fue una cosa que puso el pabellón muy muy para arriba.
¿Cómo ves a esos nietos y bisnietos?
Impresionantes.
Impresionantes. Hay unos que son impresionantes. Yo estoy muy orgulloso
de ellos. Y, además, el cajón ha dado más posibilidades de expresión
para otras cosas. ¿Por qué el violín no? ¿Por qué la armónica no? ¿Por
qué el banjo no? ¿Por qué el bajo no? ¿Por qué el coro no? ¿Y el piano?
El secreto que había ya está claro. Hay una postura de la gente. “Uauuuuuhhh.
¿Cómo? ¿Así?”. Ayudó a entender. Yo vine tocando, no he inventado nada.
Yo he añadido un color diferente. Cuando dicen que he venido a
estropear el flamenco con el cajón yo digo ¿cómo? El cajón no tiene
fuerza para eso... ni yo tampoco. ¡Nadie tiene fuerza para estropear el
flamenco! ¡Nadie! ¿Qué se han creído? El flamenco tiene un suelo muy
potente, tiene su raíz. Si no, no existiría. El formato que inventaron
unos chalados por ahí, puede tener un año un éxito impresionante y
mañana nada. Pero no tiene nada que ver con el flamenco. El flamenco es
una cosa muy antigua. La pureza dicen... No es puro. Puro era yo que no
lo sabía tocar. El flamenco no puede ser puro. Está mezclado con íberos,
gitanos, moros, judíos... No, no, el puro era yo. Ahora ya no soy puro,
ya tengo la experiencia. La samba tampoco es pura, el jazz no es
puro... Pura es la gente que va a iniciarse en esas músicas y llega sin
saber nada.
¿Crees que los patrones que tú inventaste se han convertido en estándar?
Me
pueden atribuir eso porque he sido el primero y la gente puede decir
que he inventado eso, pero yo digo que no, que estoy haciendo la misma
pulsación que el bailaor, el palmero, el guitarrista, el cantaor... Yo
no he inventado nada. El patrón es del flamenco. Puse un color, como si
viene un arpista, un piano... Es como si mi bisabuelo se despertara
ahora y viera a un trombonista tocando samba. Jajaja. ¡¿Un
pianista?! Yo he pensado mucho en mi bisabuelo antes de hacer eso en el
flamenco. Si se despertara y viera cómo estaba la historia de aquello...
Es que en mil ochocientos el concepto de aquello era otra cosa. El
flamenco, igual. Luego lo que pasa es que se quedaron parados mucho
tiempo.
¿Qué evolución le ves al flamenco?
Ahora
mismo está el futuro más potente que se puede conocer. El que viene,
seguro que será impresionante porque tiene una buena huerta, una tierra
buena y lo que se ha plantado... ¡buuuuaaahh! Los árboles que hay ahí no veas cómo son de buenos. Y, claro, el pasado también. Todo está metido en el mismo contexto.
¿Ves a los jóvenes tan valientes como fuisteis vosotros?
Sí.
Todo es un espejo. Como yo digo de los guitarristas. Siempre digo que
en España no hay un guitarrista malo. ¡No hay ninguno malo! Pero Paco
está aquí (y pone la mano lo más alta que puede). Y ahora mira a todos
los que se reflejan en Paco... Y los que cantan se están ‘espejando’ en
Camarón. Los que tocan la flauta, en Jorge Pardo... Los del bajo, en Carles Benavent. En Chano Domínguez
los del piano. Y ahora Antonio y el Parrilla y el otro... Son gente que
estamos ahí sólo por eso, no estamos por otra cosa porque detrás viene
gente con la que tenemos que compartir el secreto, para que sepa.
¿Qué puede aprender el aficionado al flamenco en ‘Festejo’?
No,
es que en ‘Festejo’... Lo que pueden ver dentro de mi disco es la
fantasía flamenca. No quise ser tan flamenco, tan jazz, tan sambero...
No tengo ninguna intención en ese sentido porque yo ya he dejado de
pensar en eso, en el nacionalismo así. Yo soy del otro nacionalismo (y abre los brazos con queriendo abarcar la tierra entera).
Me gusta todo, el detalle de aquí, el detalle de allí... es un disco de
detalles, simplemente. No es un disco de jazz, no tiene esa precisión,
es otro tipo de formato. Juego con muchas cosas. Le digo a los músicos
que tal tema es un tanguillo de Cádiz y el argentino que está al lado me
contesta (imita el acento) “ché cómo va a ser un tanguillo de Cádiz, es una chacarera”. Y luego el otro dice que es una cosa de la música gnawa... Jajajaja. Mi disco es así.
Es como la historia de la música...
Está
lleno de eso. ¿Cómo puede ser eso un fandango de Huelva? Sí, chico,
tiene su ritmo, está denominado así. ¿Pero con esa armonía? ¿Pero con
esa melodía? No, es música de Minas Gerais, otro dice que de Milton
Nascimiento. Me está gustando por eso. Estoy muy contento. El único
problema es que es muy lento por la incapacidad monetaria, industria,
mercado... es complicado. Pero vamos a hacer que, paso a paso, la cosa
vaya a su sitio.
Para más información:
_____________________________________________________________________________________________
TANGOS (TOMATITO, JUAN CARMONA, JORGE PARDO, RUBEN DANTAS y CARLES BENAVENT)
Código del texto de relleno<iframe
width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/ouzRmqZn5ow"
frameborder="0" allowfullscreen></iframe>_____________________________________________________________________________________________Entrevista con Rubem Dantas
Percusionista Nació: Salvador de Bahía, Brasil (1954)
Destaca por: ser considerado el padre del cajón flamenco
Obra destacada: Festejo ¿Sabías qué? Colabora con Paco de Lucía, Chick Corea, Gilberto Gil Frase: “Camarón era la biblioteca del flamenco” |
El cajón flamenco nació cuando Rubem Dantas
introdujo el cajón peruano para realzar el ritmo de lo jondo. Tras el
histórico eureka musical, el percusionista brasileño recorrió el mundo
con grandes figuras del flamenco y del jazz. Ahora lanza su vibrante
disco Festejo acompañado de maestros como Chick Corea, y Paco de Lucía.
Rubem Dantas interrumpe sus respuestas porque ríe sin parar con esa
carcajada brasileña tan contagiosa. El percusionista, considerado el
padre del cajón flamenco al introducirlo de gira con Paco de Lucía, ha
creado escuela. “Mis hijos” llama a sus herederos. Dantas rebosa
entusiasmo por su disco Festejo, en el que colaboran nada menos
que 32 artistas, entre ellos grandes como Chick Corea y Chano
Domínguez. Es un zahorí de melodías de la vieja escuela, de los que ya
no quedan. Donde nace un músico innovador, allá que viaja con su maleta
para oírle cara a cara, sin discos ni intermediarios. Su verbo ha
heredado el ritmo ágil y la chispa de sus percusiones.
P. ¿Qué le dijeron los gitanos flamencos cuando de repente un día le vieron aparecer con un cajón peruano?
R. ¿Los gitanos? Locos, encantados, más que ninguno. Recuerdo que al
principio a la mayoría les chocaba y decían “llama a Rubén, que le gusta
complicarse la vida”. Prince y otros salieron corriendo cuando vieron
lo complicado que es el flamenco, porque hay que estudiar y mamarlo. El
único que mamó fue Chick Corea.
P. Después de formar una big band flamenca con 27 músicos, a continuación graba un disco con 32 colaboradores… ¿excesivo?
R. Los gastos fueron horribles, pero es que la gente llegó a
amenazarme… Figúrate, cuando le di el disco a Miguel Ríos me preguntó
medio enfadado y medio en broma, ¿por qué yo no estoy aquí?
P. ¿Autoeditado?
R. Ya no estoy con la familia Philips ni Sony. Estoy por mi cuenta
para componer y producir, y luego viene la distribuidora, a pesar de que
el formato de percusionista tiene problemas con el marketing.
P. Ahora tiene 24.000 visitas en Myspace… Pero ¿cómo empezó Dantas?
R. Pues en una escuela de samba, y con los grupos Sangue e raça y
Machina naturale. Mi madre era concertista de piano clásico y mi padre
ingeniero que colaboró con la Nasa.
P. Siempre está investigando nuevos ritmos.
R. Hago pesquisas con otros músicos y por mi cuenta. Más que ser
curioso, me preocupo por la cultura y soy un apasionado de la música.
Aprendo las formas, los ritmos, el color armónico… ahora mismo parece
que los músicos están perdiendo la cultura.
P. ¿Cómo se ve después de tantos años?
R. Soy la referencia, no estoy copiando a nadie. Todos me tratan como
si fuera su padre. La fusión si no fuera con cariño, no debería
hacerse. Ahora somos muy arrogantes.
P. El veterano productor Ricardo Pachón opina que el cajón es el instrumento que más daño ha hecho al flamenco…
R. Puede ser. No me choca para nada. Es su opinión y la respeto.
Habrá hecho daño, pero ahora tiene que hablar de mis hijos, no sólo de
mí…
P. ¿Qué influencia ejerce el Sur en sus directos?
R. Andalucía deja que la gente sea real por su historia, porque por
aquí ha pasado de todo. Hay que mamarlo, aunque haya mucha gente que lo
esconde. Hay también mucha gente que no deja desarrollar el arte para no
perder el control. Te haces purista y crítico, pero el día que hay que
saber también de flauta y cajón, te joden.
P. ¿Cuál fue su mayor sorpresa en sus célebres actuaciones?
R. Tan sólo me chocó una actuación en Algeciras, donde a Paco [de
Lucía] no le dejaron tocar porque traíamos bajo eléctrico y cajón.
“¿Pero qué es eso?”, decían extrañados.
P. ¿Fue sencilla su conexión con lo jondo?
R. El flamenco no tiene la condición de la salsa. Aquí no funciona
así porque conozco perfectamente la historia del flamenco. Sabicas me
llamaba ‘el sobrino malagueño’. Nunca Rubén. Pero el flamenco no es puro
y tiene líneas con mucha gente, como los judíos.
P. ¿Cuándo conoció a Paco de Lucía?
R. Ufff, en el aeropuerto de Barajas, en 1977. Le conocí junto a
Ramón de Algeciras y pese a que me decía que Paco estaba loco por Brasil
y Baden Powell, me daba vergüenza llamarle porque él ya era grande con Entre dos aguas.
Hasta que un día me invitó y empezamos a tocar juntos. Desde entonces,
hemos hecho tantas giras y siempre con el pabellón muy alto…
P. ¿Qué recuerdo conserva de Camarón?
R. Era la biblioteca del flamenco y una persona muy tranquila.
Viajaba para ver cómo una persona tocaba el triángulo, porque en los
años 70 no había botones para ponerte el profesor delante. Él también
viajaba para descubrir músicos, fue el decano.
P. ¿Recuerda cuándo oyó por primera vez flamenco?
P. Yo busqué el flamenco desde Bahía porque uno me tocó mineras y
fandangos. Me explicó que la orquesta del flamenco era la guitarra y el
ritmo con las manos. Yo me decía: “si en el ritmo no había instrumentos,
me voy para allá para ponerlos”. Al llegar, luego me decían “ese
bahiano está loco”.
Código del texto de relleno<iframe
width="640" height="480" src="http://www.youtube.com/embed/n_KGim-BjTY"
frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Discografía
Estos discos relacionados con
Rubem Dantas pueden interesarte.
- • camarón. Como el agua. Universal Music, 1989.
- • pardo, jorge. Veloz hacia su sino. nuevos medios, 2004.
- • de lucía, paco. Sólo quiero caminar. universal music, 1983.
- • Corea, Chick. The Ultimate Adventure. Universal Classics, 2006.
- • Benavent, Carles. Agüita que corre. Nuevos Medios, 2004.
- • Pastor, Luis. Pásalo. Karonte.
Enlaces
Enlace del artículo
http://www.tertuliaandaluza.com/cultura/rubem-dantas/_____________________________________________________________________________________________
Paco de Lucia en vivo desde Vienne - 2001Primero, solo de cajòn y percusion (El Grilo y R. Dantas)Luego, baile por alegriasTema : Chiquito - LP. Live sextet one summer night / LP. Castro Marin
Código del texto de relleno<iframe
width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/9PkuDveC6GU"
frameborder="0" allowfullscreen></iframe>_____________________________________________________________________________________________
Media vida ha tardado el percusionista brasileño Rubem
Dantas en debutar discográficamente. Su 'Festejo' es una celebración de
la amistad en la que han participado 22 músicos (entre ellos Paco de
Lucía, Pedro Ruy Blas, Chick Corea, Pardo.), de los que ocho, más Chano
Domínguez como refuerzo, le acompañarán hoy domingo en uno de los
conciertos más esperados de la edición número 23 de Jazz en la Costa (El
Majuelo de Almuñécar, 22.00 h., 14 euros). El bahiano ha estado en
grabaciones míticas como 'La leyenda del tiempo' de Camarón y ha pasado a
la historia de la música por haber cambiado para siempre el sonido del
flamenco al introducir el cajón peruano (ya 'cajón flamenco') en esta
música.
-¿Por qué ha tardado tanto en grabar su primer disco?
-Porque tenía que atender a muchos proyectos y no tenía
tiempo. También es cierto que no había mucho interés en grabar a un
percusionista solo y ya por fin tuve tiempo para armar yo solo el disco.
-El otro día Stanley Clarke (también en Jazz en
la Costa) decía que le ocurría lo mismo a los bajistas, que nadie los
veía titulando discos más allá de la sección de ritmo.
-En Brasil los que pudieron grabar fueron los que se
fueron a los Estados Unidos. Afortunadamente ya no parece tan extraño
que un músico de sección se haga solista ni hacer un disco es algo tan
costoso.
-¿Y tardará otras 45 años en sacar el segundo?
-No, ya tengo escritas algunas piezas, que incluso esta
noche van a sonar en el festival como avance. Y como el año que viene se
cumplen los 30 años del cajón flamenco quiero hacer algo con una Big
Band.
-Veo la lista de compañeros, una treintena. ¿Cómo puso orden entre tanta gente?
-Los percusionistas tenemos un cierto don de mando, marcamos el ritmo y todo se ponen firmes (risas)
Volviendo a la juventud, ¿cómo llegó a España?
-Yo vine premeditadamente, llegué para quedarme con el
grupo folclórico Viva Bahía y terminó la gira europea en España y me
quedé.
-¿Y Granada?
-Vine aquí por primera vez en el año 76 y ya pensé que sería un buen sitio para vivir.
-¿Y cómo entró en contacto con el flamenco?
-En Bahía tenía un amigo italiano que me enseñó los
primeros secretos del flamenco. Fue la primera persona a la que yo
escuchaba mineras, tarantos, soleás. Leonardo Boccia fue mi maestro, un
increíble guitarrista.
-Pero aquí tendría que aprenderlo ya todo en serio.
-Pero muy en serio, porque el flamenco para mí es como un
tratado de física nuclear y yo ya era muy mayor. Afortunadamente entre
todos mis amigos flamencos, Paco, Camarón, la Susi, Melchor. me
estuvieron ayudando.
-¿Cómo conoció a Paco de Lucía?
-El mismo día en que despedía a mis compañeros de Viva
Bahía conocí a Paco, pero yo no sabía quién era, me dio un papelito a
nombre de Francisco Sánchez Gómez y su teléfono. Tiempo después poniendo
orden en mis cosas una amiga me dijo que él era él (risas), y al cabo
del tiempo, Paco que quería hacer algo diferente para el disco de Falla,
buscó al grupo Dolores. La verme me preguntó por qué no le había
llamado (risas) y le dije que me había dado miedo llamar a una
eminencia. ¡todavía me llama tonto! (risas).
-¿Sabe que los discos de Dolores son ejemplares muy queridos por los dj's ingleses?
-Eso es maravilloso. Pero la pena es que se hayan
valorado cuarenta años después. Eso siempre ha pasado porque cuando
hicimos 'La leyenda del tiempo' todos lo ponían a parir y fíjate luego.
Tanto lo criticaban que había un plan-B de Camarón solo con Tomatito.
-¿Sabían que con ese o 'Sólo quiero caminar' estaban haciendo discos históricos?
-Nosotros sí, pero parece que sólo nosotros (risas).
Estábamos haciendo algo nuevo y cada día era un descubrimiento nuevo;
ahora parece normal, claro treinta años después, pero en aquellos discos
se escribieron la reglas de lo que iba a ser el flamenco futuro.
-Se habla del sexteto de Paco de Lucía con la
misma reverencia que de los 'quintetos' de Miles Davis. ¿Cómo fue la
vida dentro de ese combo?
-Éramos y somos como una familia, nos hemos divertido
mucho, hemos discutido mucho, hemos hecho felices a mucha gente en todos
los rincones del mundo, que se volvían locos cuando nos veían tocar. La
vida del grupo da para una película, me acuerdo en Rusia que Manolito
Soler no podía bailar de flores que había en suelo. fueron unos años
increíbles.
Enlace
http://www.ideal.es/granada/v/20100718/cultura/ruben-dantas-percusionistas-tenemos-20100718.html
_____________________________________________________________________________________________
El percusionista monta la Granada Reunion Band los jueves de mayo
Con esta formación multitudinaria debutará en la sala Who de Granada mañana jueves 5 y permanecerá como banda "residente" todos los jueves de mayo.
Hace treinta años que este brasileño le sugirió a Paco de Lucía
que una caja de madera andina, que sonaba a leña rota, podía encajar
bien en el flamenco, y desde entonces aquel cajón peruano es tan
importante como la voz, la guitarra o las palmas en esta música. De
aquellas primeras experiencias con Paco y con Camarón recuerda Rubem que "estábamos
haciendo algo nuevo y cada día era un descubrimiento diferente; ahora
parece normal, claro, treinta años después, pero en aquellos discos se
escribieron la reglas de lo que iba a ser el flamenco futuro". Hay quien dice, como el productor Ricardo Pachón, que el cajón ha sido "la ruina del flamenco", pero resulta absurdo ponerle puertas al mar de cajones que suenan cada noche.
Rubem Dantas nació en Salvador de Bahía (Brasil) y llegó a España a mediados de los años setenta. En nuestro país comenzó a trabajar con Jayme Marques, Jean Luc Vallet, Manolo Heredia y Tito Duarte. En esa época coincidió con el cantante Pedro Ruy Blas, que le ofreció la posibilidad de unirse al proyecto del grupo Dolores, revolucionario grupo de jazz rock contemporáneo que daría forma a la mundialmente famosa banda de Paco de Lucía, guitarrista al que ha estado ligado desde entonces. Hace tres año sacó por fin su primer disco, 'Festejo', y se mueve artísticamente a caballo de Cádiz, donde montó su Big Band, y Granada. La Granada Reunion Band (con el mismo nombre de la banda de blues de Raimundo Amador en el Festival de jazz de Granada) está formada por Víctor
Olmedo, Alex Oliveira, Julio César, Miguel Pérez, Andrew Lynch, Miguel
Corral, Dan Ben Lior, José María Pedraza, Luis Poyatos, Jesús Santiago,
José Carlos del Olmo, Enrique Lugones y como invitados Javier Doménech y ¡"El niño de las pinturas"!
Dantas,
vecino de Granada desde hace un par de años, ha agitado el mundillo
musical local con su presencia y sus enseñanzas, celebrando estas tres
décadas con cursos de aprendizaje y con esta formación multitudinaria
que debutará en la sala Who de Granada mañana jueves 5 y permanecerá como banda "residente" todos los jueves de mayo.
Enlace
http://www.buscamusica.es/contenido.php?id=1538
_____________________________________________________________________________________________
“Tuve la dicha de conocer a Paco de Lucía, Ramón de
Algeciras, Camarón de la Isla, Pepe Habichuela, La Susi… Trabajar con
ellos fue una experiencia para mi carrera. El flamenco para mí es como
un tratado de física nuclear”
¿Te gusta leer los créditos de los discos? ¿Sí? Pues entonces no hace
ninguna falta que te presentemos a Rubem Dantas, percusionista brasileño
esencial en la música española, con vínculos poderosos con el flamenco.
Afincado en Granada, Eduardo Tébar conversa allí con él.
Texto: EDUARDO TÉBAR.
Ensaya por las mañanas porque cree que los músicos trabajan más
frescos a primera hora. Extraño ritual para un artista limado en largas
veladas junto a calaveras como Camarón, Jorge Pardo o Paco de Lucía.
Brasileño de nacimiento y español adoptivo desde el germen de la
Constitución, Rubem Dantas (Salvador, 1954) es y será siempre recordado
por introducir el cajón peruano en el flamenco. El antes y el después.
Tras toda una vida volcado en proyectos ajenos, el percusionista bahiano
se paseó a cuerpo como compositor en “Festejo” (autoeditado, 2008), el
álbum que tardó 45 años en parir. Grabación pantagruélica: ¡una
treintena de invitados! Y vocación de ONU musical a la manera de Joe
Zawinul. Entre los acólitos, colosos como Chick Corea. Afincado en
Granada, Dantas se zambulle en la agitada escena musical de la ciudad.
Una noche acompaña al guitarrista israelí Dan Ben Lior, otra imparte
clases magistrales en un garito –hasta hace poco– humeante, cuando no
homenajea al malogrado cantautor Esteban Valdivieso, improvisa con el
multiinstrumentista arábigo Suhail Serghini, se trae a Chano Domínguez, a
Kind of Cai o colabora con flamencos como Pablo Rubén Maldonado.
¿Eres feliz en esta ciudad?
Granada es fascinante en la cabeza de cualquier americano. Siempre la
sentí como mi casa, no sé por qué. Vine aquí por primera vez en el año
76 y ya pensé que sería un buen sitio para vivir. Sabicas me bautizó
como Rubem “El Malagueño”. Me llamaba su “sobrino malagueño”. Soy un
malagueño al que le gusta Cádiz, pero que vive en Granada.
Tardaste casi medio siglo en debutar como firmante. ¿Por qué tanta agonía?
Porque tenía muchos compromisos con otras cosas y no había posibilidad
por parte de las compañías discográficas. Ellos estaban más interesados
en cantantes que en percusionistas o, incluso, compositores. El mercado
musical estaba muy limitado para algo nuevo. Hoy tenemos más
posibilidades de producir nuestro propio trabajo y hacer algo más
auténtico.
En solitario, pero no solo. Menuda lista de amigos…
Sí, fue un placer poder contar con todos mis amigos para darle forma a
“Festejo”. Era un trabajo que ya me estaban pidiendo desde hace mucho
tiempo. Cuando iba a festivales, la gente se sorprendía de mi trabajo
como compositor, así que era de ley que este disco saliera al mercado.
¿Qué recuerdas de las sesiones con tu noneto y las estrellas invitadas?
Gloria bendita. Imagínate que estás trabajando con el maestro Paco de
Lucía, Jorge Pardo, Carles Benavent, Joaquín Grilo… Todos mis amigos del
Paco de Lucía Sexteto. Y así una larga lista de grandes músicos y
maestros. Me siento muy orgulloso.
Es curioso: empezaste tocando el piano.
Acabé siendo percusionista por mi adicción a la música popular. En la
calle no había piano; había otras cosas… También tuve el honor de
conocer a mi maestro, Vadinho do Gantois, a los 14 años. De ahí aprendí
sobre la música popular de Brasil, donde está realmente la base cultural
de mi país.
Llegaste a España hace más de 30 años, cuando se cimentaba la
revolución de rock y flamenco de Veneno. ¿Cómo viviste aquel periodo?
Fue una época de transformación. Había curiosidad por indagar en todos
los estilos musicales. Fue una maravilla, todo era nuevo para mí.
Agradezco mucho haber estado allí, conocer a los grandes y trabajar con
ellos. Me siento afortunado de ser parte de esa revolución musical.
España estaba muy cerrada y tenía que abrirse al mundo.
Y el duende, ¿cuándo te toca?
Yo llegué al flamenco de pequeño, cuando escuchaba música de España.
Tuve la dicha de conocer a Paco de Lucía, Ramón de Algeciras, Camarón de
la Isla, Pepe Habichuela, La Susi… Trabajar con ellos fue una
experiencia para mi carrera. El flamenco para mí es como un tratado de
física nuclear.
Entre tanto, añadiste el cajón. ¿Eras consciente del cambio de sonido?
Sí que lo era. Sabía que era una buena progresión para el flamenco. Hoy
en día ya tienes muchos instrumentos de orquesta que se han unido al
flamenco. Estoy muy orgulloso por haber dado este paso. Notaba que el
cajón que sintonizaba perfectamente con el soniquete a madera del
bailaor. Se ha creado una gran escuela de percusionistas en el flamenco.
Tus percusiones se escuchan en dos discos terremoto: “La leyenda del tiempo” y “Sólo quiero caminar”.
El trabajo fue muy duro. No había una referencia anterior, así que
imagina el miedo que pasé. Ni yo había escuchado eso antes. ¡Yo era la
referencia! Estábamos creando algo nuevo y cada día era un
descubrimiento. Treinta años después, parece muy simple, pero en
aquellos discos se implantaron las reglas de lo que iba a ser el
flamenco futuro.
Aquel sexteto de Paco de Lucía alcanzó niveles estratosféricos de veneración, casi a la altura de los quintetos de Miles Davis.
Nos divertíamos y nos peleábamos mucho. Como cualquier familia. Fueron
años inolvidables. Me acuerdo de Manolito Soler en Rusia, sin poder
bailar por la cantidad de flores que había en el suelo. Conocí a Paco el
mismo día en que despedía a mis compañeros de Viva Bahía. No tenía ni
idea de quién era. Me dio un papelito a nombre de Francisco Sánchez
Gómez y su teléfono. Mucho después, poniendo orden en mis cosas, ¡una
amiga me dijo que él era él! Pasó el tiempo hasta que Paco echó mano del
grupo Dolores. Quería hacer algo distinto para el disco de Falla. Al
verme, me recriminó que no le había llamado. Le contesté que me
acojonaba llamar a una eminencia. ¡Todavía me llama estúpido!
[carcajadas].
Pero te ha ido bien. Con el grupo de Chick Corea ganaste un Grammy.
Es una opinión más sobre la música que hacemos. Un Grammy es un premio
muy valorado y se agradece que se le dé a la buena música. Siempre anima
a seguir trabajando. Chick es un músico de mucho talento, él compuso la
música para mí. Se lo merece.
Ahora te suelo ver más centrado en la sanza y la cuica en las jams.
La cuica es muy común en las orquestas brasileñas. Suelo emplearla
porque al público le llama la atención, como me ha ocurrido muchas veces
con Chick Corea. Me debo estar haciendo mayor, porque la cuica la usan
las personas mayores en Angola [sonríe]. En el caso de la sanza, fascina
porque suena extraña, mágica.
En Granada, colegas tuyos procedentes del jazz como Dan Ben
Lior o el norteamericano Paul Stocker coquetean con el flamenco estos
días. ¿Te interesa esa mezcla?
Lo que más he hecho en mi vida es mezclarme. Lo hago desde que vivía en
Salvador de Bahía. Es algo que está en mí. Yo nací mezclado: soy una
mezcla de razas y de ritmos.
¿Quedan sueños por cumplir en la música?
La música es algo muy grande para mí. Siempre hay sueños que cumplir y
sueños que se han cumplido. Ahora lo que quiero es seguir grabando y
poder producir con grandes artistas.
Enlace
http://www.efeeme.com/82149/rubem-dantas-heredero-de-razas-y-ritmos/
_____________________________________________________________________________________________
Rubem Dantas, el iniciador de la percusión flamenca
Estamos
en los comienzos de los años 60, y un muchacho con la afición por las
percusiones empieza su carrera en la escena musical de Salvador de Bahía, en Brasil, rodeado por el samba, choro, candomblé y capoeira.
Este jovencito de buenas esperanzas se llama Rubem Dantas,
y no puede imaginar que su destino le llevará a ser el percusionista de
referencia para un género tan fascinante cuan hermético y lejano como
el flamenco.
Es
cierto que sus gustos musicales son muy variados, ama la música clásica
y su madre, pianista le endereza hacia el estudio de este instrumento,
pero pronto se harta de todas las escalas, ejercicios y solfeo, y en sus
aventuras por las calles de la ciudad decide cambiar de instrumento,
habiendo encontrado su ‘gurú’, Vadinho do Gantois, que le ayudará a transformarse en poco tiempo en una de las mejores nuevas promesas de la percusión brasileña.
Su
primer encuentro con el flamenco se realiza de una forma que anticipa
el mestizaje de nacionalidades que caracteriza esta historia, pues es un
guitarrista italiano, Lorenzo Boccia, que sigue viviendo y enseñando en el Conservatorio de Bahía, el primer músico que le habla y le enseña varios palos flamencos.
Escuchando
esta música, tan llena de ritmo, su pregunta surge espontánea: “¿Qué
instrumentos de percusiones se tocan en el flamenco?”
La respuesta es sorprendente: “Aparte las palmas y los tacones de los bailaores, nada más.”
El joven Rubem: “sería bonito ponerle un atabaque, una cuica…”
Y el guitarrista, simpáticamente: “¡Rubem, tú estás loco… ja, ja, ja!”
Después de unos años de actividad con el grupo Sangue e Raça, tocando en los mayores festivales nacionales, decide trasladarse a París.
Allí se queda por algunos años, y trabaja con varios músicos importantes como Eddy Louiss, Christian Escoudé y Paco Sery.
En
1977 Rubem viaja a Madrid con un grupo de música bahiana; son los años
de la transición hacia la democracia, los comienzos de la Movida:
músicos, actores y escritores llenan los locales y los bares, pero más
que ninguna otra, es el perfume de una nueva libertad de expresión la
esencia embriagadora de aquellos tiempos.
Rubem decide quedarse en España, así, sin planteárselo demasiado, “con una camiseta y un par de pantalones”.
Entra en contacto con el también joven y reconocido Jorge Pardo,
flautista y saxofonista de formación clásica con frecuentaciones en el
mundo del jazz, y de pronto se encuentran juntos en las filas de la
banda Dolores, que se está dando a conocer con una fusión de jazz, rock y aires aflamencados.
Esta banda se gana la atención de Paco de Lucía,
que justo en aquellos tiempos está pensando en juntar una formación
estable propia, después de la legendaria y milagrosa colaboración con Camarón de la Isla,
su perfecto compadre cantaor, junto al cual había estado grabando una
decena de discos que marcaron una época, revolucionando para siempre el
mundo de los aficionados.
Ahora
Paco tiene ganas de explorar las potencialidades instrumentales del
flamenco, liberándose del papel de acompañador al cante, y en sus planos
hay sitio para el joven talento brasileño.
En
los primeros tiempos de la nueva formación, Rubem se luce con los
“cueros”; o sea, bongós y tumbadoras, en directo y en el estudio: el
enorme éxito de ‘Entre Dos Aguas’, una rumba instrumental que Paco
grabó improvisando en los pocos minutos que quedaban al final de una
sesión de grabación, había oficializado la llegada de la percusión
latina en el mundo del flamenco, y muchos imitadores ya se lanzaban al
ataque, pero Paco siempre está un paso (o dos) por delante de todos…
El grupo que el genio de Algeciras reúne, está compuesto por Rubem Dantas, sus hermanos Pepe y Ramón al cante y guitarra, Jorge Pardo, Carles Benavent al bajo eléctrico, y posteriormente el bailaor sevillano Manuel Soler.
Con
esta formación empiezan a finales de los años setenta a dar la vuelta
al mundo, cosechando éxitos por donde quieran que vayan.
Durante una etapa en Perú, llega una invitación para un concierto en la embajada de España de Lima, y en la misma noche está prevista la actuación de una artista de música popular peruana muy famosa, Chabuca Granda, la cual no se separa nunca de su percusionista talismán, el cajonero Carlos ‘Caitro’ Soto.
Paco
se queda embrujado por aquel timbre de percusión tan seco, un soporte
ideal para la guitarra, a la vez presente pero respetuoso, menos chillón
de las llamativas tumbadoras.
Aquel
es el momento unánimemente reconocido en que el cajón peruano se
reencarna literalmente en el flamenco, y el delicado papel de acuñar un
nuevo vocabulario rítmico para este instrumento está en las manos de Rubem.
Los resultados no tardan en llegar, y el primer gran éxito con una grabación de cajón es el disco ‘Sólo Quiero Caminar’, del 1981, en el cual Rubem lo utiliza para los tangos que dan el titulo al trabajo, y también en la rumba Chanela.
A partir de allí empieza la historia, una serie de discos increíbles, como Siroco, Zyriab y Live in the USA, donde el cajón es una presencia fija, hasta el final del ciclo.
Acontece
que Paco, después de 25 años de giras y grabaciones, en las cuales el
núcleo histórico ha permanecido casi invariado (aparte la retirada de Manuel Soler
por razones de salud), decide que ha llegado el momento de volver a
fundar un nuevo grupo, y así, de repente la colaboración Paco-Rubem
llega a su fin.
Difícil
entender las razones, quizá simplemente un nuevo enamoramiento musical
de Paco por otros compañeros, así como le pasaba a Miles Davis, que desmontaba grupos que parecían inmejorables, y cada vez lograba reinventarse a sí mismo.
Rubem, ahora reconocido en todo el mundo, continúa sus colaboraciones estelares al lado de músicos como Pat Metheny, Gilberto Gil, Milton Nascimento.
Graba un disco con Touchstone, el proyecto de Chick Corea que reúne a Dantas, Pardo y Benavent junto al baterista americano Tom Brechtlein.
Funda un grupo llamado ‘Flamenco Big Band’ de 27 elementos, y en 2007 publica su primer trabajo como solista, ‘Festejo’.
Su estilo es bello, sin ser complicado, con un hermoso sonido de cueros y un fraseo redondo y melódico.
También
su sonido de cajón es muy cálido, con una notable diferencia entre él y
todos los cajoneros españoles que siguieron sus pasos: Rubem siempre ha
preferido un sonido sin bordonera; o sea, el modelo de cajón más común
en Perú, mientras que por alguna razón, en el flamenco se utilizan casi
siempre cajones con bordoneras, los cuales en Perú se suelen utilizar de
manera minoritaria.
Su
set típico, formado por cajón, tumbadoras, caja de batería, platillos y
cortinas metálicas, es hoy en día muy común en muchos cuadros
flamencos, y si en el flamenco actual hay una generación de
percusionistas de nivel mundial, se debe en gran parte a su talento, su
curiosidad y espíritu innovador.
Paolo De Gregorio
Enlacehttp://www.webflamenco.es/articulo-4-2/
_____________________________________________________________________________________________
El percusionista Rubem Dantas y Chano Domínguez tocan mañana en el Festival Jazz en la Costa
Mañana la 23 edición del Festival de Jazz en la Costa, que se
celebra cada año en el Parque de El Majuelo de Almuñécar (Granada),
llenará los escenarios el octeto del reputado percusionista de Salvador
de Bahís (Brasil) Rubem Dantas, formado por músicos de nacionalidades
distintas que aúnan sonidos y culturas más allá de cualquier límite o
frontera, con ritmos poderosos y contundentes de gran espontaneidad
musical. Contará con un invitado especial: Chano Domínguez.
Así, tras la inauguración que ha corrido a cargo del vibrafonista
Bobby Hutcherson y por el pinaista Cedar Walton, dos maestros
imprescindibles que han recibido la más alta distinción nacional de la
música en Estados Unidos, The National Endowment For The Arts (NEA)
2010, completan la nómina de figuras jazzísticas para el festival de
este verano, que se celebrará hasta el 24 de julio, el trompetista
Christian Scott, señalado por la prensa como 'el nuevo Miles Davis'; el
saxofonista James Carter; la cantante, guitarrista y compositora
Madeleine Peyroux; Stanley Clarke Band con Hiromi; el pianista y
compositor Uri Caine; y el David Sanborn Trío, con Joey Defrancesco y
Steve Gadd, informa la Diputación de Granada en una nota.
El
lunes 19 de julio será el turno del trompetista Christian Scott, que
cuando sólo tenía trece años, ya era capaz de tocar en la banda de su
tío, el legendario saxofonista Donald Harrison, y pocos años más tarde
ya grababa su primer disco. Con solo 27 años cuenta con una nominación a
los Grammys, cinco discos y ha compartido escenario con Prince. Su
último trabajo 'Yesterday You Said Tomorrow' está considerado el mejor
álbum de Jazz del 2010.
James carter,
Saxofonista original
El martes 20 de julio el Majuelo será testigo de las notas de James
Carter, que ha demostrado un absoluto dominio de saxos barítono, tenor y
soprano, flauta y clarinete. Compañero musical de Wynton Marsalis, de
la Charles Mingus Band, entre otras formaciones, alabado por la crítica y
con una intensa carrera jalonada de premios, Carter es uno de los
saxofonistas más originales del jazz contemporáneo con una técnica y
puesta en escena brillante.
El míercoles 21 de julio llegará a la
costa granadina Madeleine Peyroux que, aunque americana de nacimiento,
pasó su juventud en la capital del Sena. Le gustaba tanto cantar y
emular a Bessie Smith, a Jonni Mitchel y sobre todo a Billy Holliday que
decidió hacerlo aunque fuera en la calle y así es como comenzó una
carrera musical que le ha llevado a ser una de las grandes vocalistas de
la escena internacional actual.
Stanley Clarke, que formó junto a
Chic Corea la banda 'Return to forever' será la estrella del festival
el jueves 22 de julio. Clarke es un virtuoso tanto del bajo eléctrico
como del acústico, e irá acompañado a Almuñécar de la que fuera
apadrinada por grandes maestros como Oscar Peterson, Ahmad Jamal y Chick
Corea, la pianista japonesa Hiromi.
Con una carrera marcada por
la excelencia y la originalidad, Uri Caine, que actuará en el Majuelo el
viernes 23, es un músico ajeno a escuelas y dogmas. Desde apasionantes
incursiones en la obra de Mahler hasta grabaciones del funk más enérgico
o discos dedicados a Herbie Hancock, Uri Caine es uno de los valores
indiscutibles del jazz del siglo XXI. Barbara Walker le acompaña en este
viaje musical, enriqueciendo con su enérgica voz con alma de soul.
Como clausura, el concierto del saxofonista David Sanborn, que tiene
un estilo tan personal y único que ha sido ampliamente imitado y su
presencia ha sido imprescindible en giras y grabaciones de músicos tan
relevantes como Eric Clapton, Bruce Springsteen, Eagles, Steve Wonder o
James Taylor. En Jazz en la Costa, Sanborn presentará un interesante
proyecto, un compromiso emocional con Ray Charles, con Hank Crawfrod y
sobre todo con el blues.
El festival se completa además con el
ciclo 'Jazz en paralelo', con conciertos de la Banda Municipal de Música
de Almuñécar, que ofrecerá un 'Especial Jazz' que sonará en pleno
centro histórico de Almuñécar, en la Plaza de la Constitución el
domingo, 25 de julio.
Jazz en la costa está organizado por la
Diputación de Granada y el Ayuntamiento de Almuñécar y cuenta con el
patrocinio de Cervezas Alhambra y la colaboración de la Junta de
Andalucía.
Enlace
http://www.20minutos.es/noticia/767875/0/
_____________________________________________________________________________________________
RUBEM DANTAS OCTETO CON CHANO DOMÍNGUEZ
XXIII Jazz en la Costa
- Fecha: 18 de julio de 2010.
- Lugar: Parque El Majuelo, Almuñécar (Granada).
- Componentes:
José Luis Calandria: batería
Eduardo Dorda: teclados
Dan Ben Lior: guitarra
Rodrigo Cáceres: bajo
Joaquín Galindo: saxofón
Irapoãn Freire: trompeta
Ove Larsson: trombón
Chano Domínguez: piano
Rubem Dantas: percusión
-
Comentario:
El
Festival Jazz en la Costa acogió la noche del 18 de julio la
actuación del percusionista Rubem Dantas con el pianista gaditano
Chano Domínguez como estrella invitada y ocasional telonero de lujo.
Ambos habían colaborado en el disco Festejo,
el primero que ha publicado el percusionista de San Salvador de Bahía
a su nombre tras toda la vida grabando discos de los demás, entre
ellos los más celebres de Camarón y Paco de Lucía. Pero, como en la
canción, el destino ha querido que fuese en Jazz en la Costa donde
pisaran juntos el escenario.
El programa ofreció una primera
parte del gaditano solo, un formato que domina a la perfección tanto
en pequeños espacios como en grandes festivales como éste. Ante un
millar y medio de personas que abarrotaron el parque de El Majuelo,
habida cuenta de que Chano es un imán para este Festival, donde ha
tocado en varias ocasiones y donde reconoció, ante 5000 personas
cuando la muestra era gratuita, que sintió por primera vez que su
música tenía interés para mucha gente. Su actuación fue secundada
calurosamente por el público, desde “Alegría callada”, con la que
comenzó hasta “La tarara” final, coreada solidariamente por los oyentes.
Tras
dejar espacio en el centro, tomó el escenario el octeto de Rubem
Dantas, dispuesto en semicírculo para contemplarse mejor y
realimentarse entre todos. El brasileño dirige una multinacional
sonora con músicos de todos los puntos del planeta, y aunque aquí ha
estado casi siempre en el círculo flamenco, donde hay un antes y un
después de su llegada a España con el cajón peruano bajo el brazo, ya
cajón flamenco, en directo opta por la fusión con un toque de
electricidad muy Zawinul, sin duda recibido de los tiempos con Chick
Corea. “Canelo”, “Boda” o “Pixinguinha”, son piezas incluidas en su
disco de debut, ese Festejo que reestrenaba en este festival con Chano
al piano, como ocurrió nuevamente al final para los temas “Al sur de
tu cintura” y un muy demandado bis “Pan con manteca”, recibido con
todo el público en pie en agradeciendo al músico brasileño.
- Enlace
http://www.tomajazz.com/conciertos/2010/07/chano_damtas_jazzelc.html
Texto © 2010 Diego Ortega Alonso
Fotos © 2010 Juan Jesús García
______________________________________________________________________________________________El percusionista Rubem Dantas presentará nuevo trabajo y web
Lunes, 26 de Noviembre de 2007 13:58 |
Después de trabajar durante
mucho tiempo con profesionales como Paco de Lucía, Camarón de la Isla o
Pablo Milanés, Rubem Dantas va a presentar su primer trabajo en
solitario, un disco multicultural que le ha llevado a hacer grandes
viajes por el mundo y que ahora presenta en Madrid. También presentará
su página web, actualizada en todo momento y con un atractivo diseño.
Rubem Dantas llega a Madrid
para presentar ‘Festejo’, su primer disco en solitario, por el que ha
viajado a Guinea Ecuatorial, Nueva Orleáns, Brasil, Egipto, Marruecos,
Argentina, y otros países que han hecho que ‘Festejo’ se convierta en un
disco que Dantas define como ‘multicultural’. “En el disco hay
contenidos de varias situaciones musicales del planeta. Se pueden
encontrar cosas haitianas como se pueden encontrar cosas europeas.
También hay una cantidad impresionante de instrumentos. Toco el cajón,
tumbadores, efectos de percusión. Un poco de todo”, afirma Dantas. El 26 de noviembre a las 21.30 se celebrará un concierto en la Joy Eslava (Madrid) (www.joy-eslava.com/)
donde se podrá disfrutar y escuchar en directo el nuevo disco de
Dantas, que contará con la participación especial de Antonio Carmona,
Edith Salazar, Luis Pastor, Antonio Serrano, Said Oughassad, Camilo
Edwards, Pedro Ruisblas, Eduardo Dorda, Ove Larsson, Pakito Baeza, José
Luis Calandria Irapoa Freire, Joaquín Galindo, Israel Sandoval, Yrviz
Mendez, entre otros. (Las entradas están disponibles en www.atrapalo.com y www.entradas.com) www.rubemdantas.com
es la nueva página web que el percusionista brasileño ha puesto en
marcha para que sirva de plataforma de información a los usuarios, con
quiénes quiere compartir contenidos muy variados, que irán desde
documentales y entrevistas hasta una tienda on line. También
pretende incorporar a corto plazo juegos y contenidos lúdicos
relacionados con el mundo de la música y sobre todo de la percusión,
para que el usuario interactúe con la marca. De hecho, está previsto que
a finales de año tenga un enlace a Second Life, un mundo virtual con un
enorme potencial. Rubem
ha trabajado con músicos como Camarón de la Isla (con el que colaboró
en trabajos como La Leyenda del Tiempo, Como el Agua, Calle Real o
Viviré), Alejandro Sanz, Pablo Milanés o Paco de Lucía.
Fue precisamente en una de las giras por América, con el sexteto de Paco
de Lucía, cuando Dantas descubrió el cajón peruano y decidió incluirlo
esa misma noche en el concierto para interpretar Sólo
quiero caminar. Aquella decisión creó escuela y marcó para siempre el
flamenco, que lo adoptaría como propio. El Festival de Jazz de San Sebastián reconoció su trayectoria otorgándole el Premio Donostiako Jazzaldia en 1998. |
Enlace
http://www.mundopercusion.com/noticias-de-percusion/eventos-percusion/246-el-percusionista-rubem-dantas-presentaruevo-trabajo-y-web.html
_____________________________________________________________________________________________
CÁTEDRA MANUEL DE FALLA - DOSSIER DE PRENSA V CICLO OTRAS MÚSICAS: XIX UNIVERSIJAZZ RUBEM DANTAS GRANADA REUNIÓN BAND
Alex Oliveira (Voz)
Víctor Olmedo (Voz y percusión)
Andrew Lynch (Saxo)
Joaquín Sánchez (Clarinete y armónica)
Dan Ber Lior (Guitarra eléctrica)
Miguel A. Corral (Guitarra española)
Luis Poyatos (Piano)
Miguel Pérez (Bajo eléctrico)
Jesús Rubia (Congas)
José C. Olmo (Batería)
Enrique Lugones (Voz y percusión)
Rubem Dantas (Percusión)
Organiza:
Cátedra Manuel de Falla / Centro de Cultura Contemporánea /
Vicerrectorado de Extensión Universitaria y Deportes / Universidad de
Granada
Colaboran: Palacio de los Condes de Gabia y La Caixa
Fecha: Viernes, 4 de noviembre de 2011
Lugar: Salón de actos de la E.T.S. Ingeniería de la Edificación
Hora: 20:00 h.
ENTRADA LIBRE (HASTA COMPLETAR EL AFORO)
NOTA
IMPORTANTE: CAMBIO DE FECHA. Este concierto fue inicialmente anunciado
el jueves, 3 de noviembre de 2011. Rogamos actualicen las agendas.
El
Universijaz llega a su decimonovena edición con un invitado de
excepción, elpercusionista Rubén Dantas, que ha reunido en torno a sí a
un nutrido grupo de músicos granadinos para formar la “Granada Reunión
Band”. Las percusiones tendrán un papel fundamental durante el concierto
que, con un sabor hipnótico y rítmico, será un espectáculo que
garantiza la fusión intercultural con amplias dosis de imaginación.
Palacio de la Madraza, C/ Oficios, 14.. Granada · Teléfono 958 243484 · Fax 958 290 263 · Web http://veucd.ugr.es/pages/cecuco 2
Rubem
Dantas (percusión) Es considerado el músico que más y mejor ha
desarrollado la percusión en el flamenco. Fue él mismo quien, durante
una gira por América, descubrió el cajón en Perú y lo introdujo en
España. A partir de entonces, el cajón pasaría a ser un instrumento
imprescindible para el flamenco. El percusionista brasileño ha bebido de
todas las músicas aportando en todos los géneros, desde la innovación,
una enorme sabiduría. Ha colaborado con músicos como Enrique Morente,
Camarón de la Isla,
El Potito, Ketama, Juan Ramírez, Manuel
Soler, La Susi, Chick Corea, Paquito D´Rivera, Eddie Louís, Christian
Escude, Jon Balke, Arif Marden, Vince Mendoza, María Creuza, Gilberto
Gil, Bonga, Milton Nascimento, Nana Caymi, Wagner Tirso, Carlos Carlí,
Luis Pastor, Pablo Milanés, etc.
Rubem Dantas ha participado en
numerosos discos de flamenco como Calle Real, Viviré y Como el agua de
Camarón; Siroco, Live in America y Sólo quiero caminar de Paco de Lucía;
Las cigarras son quizá sordas, Veloz hacia su sino y 2332 de Jorge
Pardo; Aigua y Fénix de Carles Benavent; A Mandeli de Pepe Habichuela;
Imán de Chano Domínguez, Jazzpaña, etc. A pesar de no ser tan conocida
su labor como compositor, los asiduos a sus conciertos pueden admirar su
capacidad creativa en la que confluyen ritmos de una amplísima variedad
musical.
---
Contacto: Joaquín López González - Director de la Cátedra Manuel de Falla –
Universidad de Granada. Tlf. 958246373 y 958243484 - Correo e.: jologon@ugr.es
_____________________________________________________________________________________________BIOGRAFÍA: Rubem Dantas
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Rubem Dantas nació en Salvador de Bahía (Brasil) en el seno de una familia que amaba la música. Comenzó sus estudios de piano de la mano de su madre, quien también le enseñó a escuchar a creadores de la talla de Maysa Matarazzo, Agustinho dos Santos, Jackson do Pandeiro, Batata, Pixinguinha, Luis Gonzaga o Elza Soares. Después de algunos años dedicados al piano, la naturaleza inquieta y curiosa de Rubem le llevó a interesarse por la percusión de la mano del que él considera su auténtico maestro, “Vadinho do Gantois”.
Él dirigió sus primeros pasos y le convirtió en uno de los
percusionistas más prometedores del momento y que actuaba en los más
importantes festivales de Brasil colaborando con grupos como “Machina
Naturale” o “Sangue y Raça”. Con esta última banda obtuvo un gran éxito
con adaptaciones de obras como “La ópera de los tres peniques” de Bertolt Brecht.
En 1977 viene a Madrid, tras vivir y trabajar unos años en París junto a músicos como Eddie Louis, Christian Escudé, Dusty o Paco Serry. En España conoce y colabora con músicos como Jean Luc Vallet,
Jaime Marques, el malagueño Manolo Heredia Bonilla, Tito Duarte,
Richard Krull y Pepe Perera, entre otros. En esa época coincide con el
cantante Pedro Ruy-Blas, que le ofrece unirse al grupo “Dolores”, entonces formado por Jorge Pardo, Jesús Pardo y Alvaro Yébenes. “Dolores” supuso en el panorama musical de la época una revolución por su forma de entender el flamenco.
Un buen día Paco de Lucía
aparece en su camino para proponerle participar en su nuevo proyecto,
un quinteto, posteriormente convertido en sexteto. Fue enconces cuando
Rubem introdujo la percusión en el flamenco, cuyos ritmos se llenaron,
de los sonidos que aportaban sus bongoes, darbucas, tumbadoras o
cortinillas, por primera vez en la historia. Un proyecto musical que con
el tiempo se convertiría en uno de los más importantes de la música
mundial, con el que Rubem recorrería los principales escenarios del
mundo y cosecharía las mejores críticas durante más de veinticinco años y
que contó también con las colaboraciones de Carles Benavent, Jorge Pardo, Ramón de Algeciras, Juan Ramírez, Manolito Soler, Joaquín Grilo, Pepe de Lucía, Duquende, Rafael de Utrera, Juan Manuel Cañizares, Viejín o José María Bandera.
En una de las giras con Paco de Lucía por América, Rubem descubrió el cajón peruano
y decidió incluirlo esa misma noche en el concierto para interpretar
“Solo quiero caminar”. Aquella decisión creó escuela y marcó para
siempre al flamenco, que lo adoptaría como propio. Desde ese día, el
cajón se ha convertido en un instrumento imprescindible para cualquier
formación flamenca.
En noviembre de 2003 Chick Corea
le invita a formar parte de su banda durante una gira por España en la
que compartiría escenario con músicos tan destacados como Jeff Ballard,
Avishai Cohen y Steve Wilson. Una colaboración que el pianista vuelve a
solicitar cuando presenta su nueva banda, “Chick Corea & Touchstone”
y para la que también son requeridos Tom Brechtlein y los antiguos
integrantes del sexteto de Paco de Lucía, Carles Benavent y Jorge Pardo.
Esta nueva formación recorre actualmente los escenarios del mundo
realizando importantes conciertos en Europa y América, donde han
recibido grandes ovaciones de público y crítica.
En agosto de 2004 Rubem Dantas presenta en Cádiz un proyecto
innovador: “Rubem Dantas & Flamenco Big Band”, la primera formación
de esta índole que se crea en el mundo, en la que no tardan en colaborar
Carles Benavent, Carlos Carli, Jorge Pardo,
Miguel Angel Chastang y Rafael de Utrera, entre otros. Una idea largo
tiempo acariciada por un músico que creció en la tradición de las
grandes bandas surgidas en su país.
En septiembre de 2007, salió al mercado su primer disco en solitario “Festejo”, en el que han colaborado grandes músicos y amigos como Paco de Lucía, Jorge Pardo, Carles Benavent, Chano Domínguez, Chick Corea,
Edith Salazar o Joaquín Grilo y que pondrá de manifiesto una de las
facetas menos conocidas del brasileño, la de compositor, hasta ahora
admirada tan sólo por los asistentes a sus conciertos más personales.
Unas creaciones en las que confluyen ritmos de una amplia variedad
musical, una sensibilidad especial y un gusto por el concepto más amplio
del sonido que corroboran, una vez más, que Rubem Dantas es, como diría
el escritor mexicano Juan Rulfo, “Ser es música”.
Rubem ha paseado su arte en compañía de músicos como Camarón de la Isla, Milton Nascimento, Enrique Morente, El Potito, Ketama, Paquito D’Rivera, Horacio Icasto, Gilberto Gil, María Creuza o Pablo Milanés, entre otros.
En el 2009 colabora al nuevo disco del guitarrista italiano Flavio Sala, titulado De La Buena Onda.
_____________________________________________________________________________________________